Mi primera amiga en la distancia

Hoy quiero hablar de una amiga que para mí es una persona muy especial, a pesar de la distancia.

No vivimos en el mismo lugar, pero los tiempos modernos nos han permitido conocernos a través de Internet. 
Fue hace tiempo; bastante tiempo: Echando la vista atrás y rebuscando en mi memoria, recuerdo aquella primera toma de contacto: Aún existía "Msn Spaces"; y era lo que usaba todo el mundo; no se había popularizado en Facebook, ni el Twitter, ni el Tuenti, ni demás cosas que hay ahora, y por las que Msn Spaces ya no existe.
Fue a través de esos "Spaces" como la conocí: Navegando por los espacios llegué al suyo y me gustó mucho; creo recordar que le dejé un comentario que hablaba sobre algo de Canarias o los nombres guanches o algo de eso que me gustó. Pero no me acuerdo muy bien porque fue hace bastante tiempo; el recuerdo es muy vago.
Lo que sí me acuerdo es que me contestó enseguida y empezamos a forjar una amistad que no nos imaginábamos que fuese a llegar hasta este punto sin conocernos en persona.

Después de estar un par de años chateando, en ocasiones hasta la madrugada, de estar ahí la una para la otra aunque sólo fuera virtualmente, hace 5 años ella vino a mi isla; así que llena de ilusión por ese gran día, fui a esperarla al aeropuerto. Aquella primera vez que nos vimos frente a frente fue maravillosa; digna de repetirse algún día. Lo pasamos muy bien durante el tiempo que estuvo aquí, pero no ha podido volver a venir ni yo tampoco ir a su isla... Algún día iré; ahora me toca a mí, ya vamos haciendo planes para cuando por fin vaya.
Ella fue la primera amiga que conocí virtualmente, luego dimos el paso de conocernos en persona y todo perfecto, aunque hay gente que no se fía de Internet porque no todo el mundo es quien dice ser; pero en esta ocasión nadie ha salido engañado; aunque no lo parezca todavía queda gente que sabe usar Internet con la cabeza.

Esta experiencia me demostró que con Internet ya no existen las distancias: No importa que uno esté a cientos, miles, o millones de KM; simplemente un par de gustos en común y un intercambio de palabras pueden servir para congeniar; para cogerle cariño a la gente sean cuales sean el resto de las circunstancias.

Esta entrada va por ti, Bea; porque quiero y porque son cosas que llevo dentro desde que nos conocimos; y espero, como ya he dicho en otras ocasiones, que esto siga y siga y que nos veamos envejecer mutuamente; porque gente como tú queda muy poca!

¡Un besazo!